2014 está siendo el annus horribilis de Malaysia Airlines. En marzo desaparecía el vuelo MH370 con destino a Pekín y seis meses después aún no hay rastro de su paradero ni de las circunstancias de su desaparición. En julio el MH17 era derribado por un mísil cuando sobrevolaba el espacio aéreo de Ucrania, en la región de Donetsk.
En total 537 fallecidos y una gran conmoción a nivel internacional, dadas las circunstancias de ambos sucesos, que ha dado lugar a la revisión de aspectos como el seguimiento de los aviones o el sobrevuelo de zonas en conflicto.
Malaysia Airlines
Como consecuencia la situación económica de la compañía es delicada, ya que la venta de billetes ha caído notablemente y el impacto en sus cuentas de resultados se ha dejado notar.
Pero a estos desgraciados accidentes, hay que sumarle un error de bulto por parte de la propia compañía. Recientemente han lanzado un concurso online en Australia y Nueva Zelanda bajo el nombre de “cosas que hacer antes de morir”, en el que solicitaban a sus clientes una descripción en menos de 500 palabras de las cosas que le gustaría hacer antes de morir.
Debido a las quejas de los usuarios, Malaysia Airlines cambió el nombre de la campaña por el de «sueños pendientes». A pesar de la rectificación, cabe preguntarse cómo inicialmente no descartaron un título a todas luces inapropiado, teniendo en cuenta las recientes tragedias vividas.
Sonia Álvarez Herrero 